en sueños. Lo dijo:
que sin tenerte ya te amo
y con amarte ya estoy muerto.
Lo dijo —imagino— sin pensarlo.
Sin pensar en mí, en mi vida
lo dijo.
Como una maldición lo dijo.
Ahora solo me queda huir,
correr detrás de ti
hasta alcanzarte y
susurrarte lo que dijo.
Porque lo dijo. Sí:
lo dijo.
Y yo te busco
dentro y fuera
de mi cabeza y mi alma
y te encuentro clara
y sincera y resplandeciente
y perfecta y despreocupada.
Y qué más da lo que dijo.
Ya lo dijo mi consciencia del libro ESTACIONES SIN RUMBO de ANTONIO LÓPEZ GÁMEZ. Share on X
Exiliaré mi alma en el olvido.
Perderé la razón sin buscarte,
ganaré frío con ese cálido recuerdo,
perderé sin trampas contra la eternidad.
Pasearé solo, sin pensar, intranquilo.
Me torturaré con el único fantasma
que me acompañará perpetuamente
amándolo hasta poder regresar.
Exiliaré mi alma en el olvido del libro ESTACIONES SIN RUMBO de ANTONIO LÓPEZ GÁMEZ. Share on X
a lo más vulnerable, a lo muerto
con una ciega crueldad.
Corta superficialmente, desangra,
remueve con saña el hueco, sin prisa,
sonriendo a su profundidad.
Sala y aprieta. Besa
con vinagre en los labios los restos
que quedaban intactos con maldad.
¿Cómo explicar lo que me quema
muy hondo en el pecho
sin romper mi garganta de gritar?
Golpea por dentro del libro ESTACIONES SIN RUMBO de ANTONIO LÓPEZ GÁMEZ. Share on X
de su alma antes que de su cuerpo,
cuerpo que, ahora lejos,
a mi lado no lo paro de soñar.
La idealicé.
La subí a un pedestal y,
tras conocerla,
tuve que subirla aún más.
No la busqué.
La puso el destino, lo divino o el olvido
aquí en mi vida, vida que nunca
volverá a ser igual.
Me enamoré del libro ESTACIONES SIN RUMBO de ANTONIO LÓPEZ GÁMEZ. Share on X
y encendiste un fuego
donde solo había cenizas
y restos de madera mojada.
No entendí entonces aquella mirada
ni aquella tranquilidad
ni la vida ni las llamas.
Sin embargo,
entré en tus ojos
—me abriste la puerta—
y encontré tras tus sueños
la causa.
Y no volvió a hacer frío.
Y no volviste a apartar tu mirada.
Me miraste del libro ESTACIONES SIN RUMBO de ANTONIO LÓPEZ GÁMEZ. Share on X
