Recuerdos de granada
—¡Eh! ¡Eh! ¡Eh!
Dejé atrás la trocha chorreando
pétalos de rosas rojas,
tras los besos fugaces de las flores
que se clavaban como alfileres
en las suelas de mis sandalias,
que buscaban desgarrar como un primer beso:
anhelos de niño, anhelos de viejo,
pasiones de joven.
Las flores ansiaban cruzar,
las flores ansiaban doler,
las flores amaban, las flores sentían.
—¡Eh! ¡Eh!
¡Oh, malditas flores!
Que en mis plantas arden
los alientos que exhalan
sus corolas.
Corolas con pétalos.
Pétalos de rosas.
Rosas que rozan,
rozan las suelas;
hieren mis plantas
y arde mi sangre.
Pero no cruzan.
—¡Eh!
No cruzan.
[…]
Recuerdos de granada del libro MALUM GRANATUM de LUCAS CUERVA Share on X
Imágenes
Recuerdos clavados
en tus ojos, tus retinas,
que jamás olvidarán los viejos tiempos.
Hasta el día en que partas
a otro mundo, a otra historia,
cuando las viejas memorias
busquen tu reconquista,
y no sepas entender
la distancia histórica que te separa
de tu antiguo ser.
Ser de agua, que camina por las plazas,
que conquista nuevas fronteras,
que flota sobre el viento,
que camina por las aguas
que vuela por la tierra
buscando la muerte,
suplicando por las desdichas,
retozando en las aceras,
escondiéndose en los Matorrales
y sufriendo por las Erillas.
Imágenes del libro MALUM GRANATUM de PEDRO JOSÉ CORDERO MORENO Share on X
La pena
La pena que llevo por dentro
tiene que aprender a volar,
se la llevará el aire que mis pulmones ya no quieren.
Con el humo de un pitillo,
vuelo por el cielo,
y llego al lugar
donde los sueños se hacen realidad.
Pero cuando aterrizo,
descubro que nada de aquello era de verdad.
Y sufro.
Hoy no será ese día.
Hoy soñaré con la realidad
¿Qué digo?
¡La viviré!
Descubriré entonces que,
caminando por la tierra,
soy mejor y más feliz
que volando por el cielo.
Porque lo real es lo que tengo de verdad.
¡Viva la vida!
¡Viva la realidad!
¡Viva tú, y viva tu hermana!
¡Alegría!
«La pena del libro MALUM GRANATUM de PEDRO JOSÉ CORDERO MORENO Share on X
La piedra
Vivió una piedra,
pulida con el tiempo.
—Querida nieta…
Se clavaron sus
cansadas pupilas
en sus ojos secos.
—Bailarás tan dulcemente
por los valles de la Sierra…
Yo te acompañaré siempre,
te guiaré en tus pasos.
Tan joven y tan dulce…
le pesaban los años.
—¡Sobrevive, muchacha!
¡No dejes que te lleven!
¡Ni las olas del mar
ni el viento embaucador,
al fatídico encuentro con la orilla!
¡Huye! ¡Vive! ¡Sé feliz!
Feliz la miraba
después de nacer,
conociendo que la vida
solo dura dos días.
—¡Despierta!
La piedra del libro MALUM GRANATUM de PEDRO JOSÉ CORDERO MORENO Share on X