Olivares Tomás, Ana María. «FRAGMENTACIÓN IDENTITARIA EN POESÍA HISPANO-NEERLANDESA: EL SUJETO ITINERANTE EN ALMAS ERRANTES DE KIM LEMMEN». Zenodo, 21 de octubre de 2025. https://doi.org/10.5281/zenodo.17409740
FRAGMENTACIÓN IDENTITARIA EN POESÍA HISPANO-NEERLANDESA: EL SUJETO ITINERANTE EN ALMAS ERRANTES DE KIM LEMMEN
Monografía comparativa
Introducción
El fenómeno de autores extranjeros que adoptan el español como lengua de expresión poética constituye un campo de investigación emergente en los estudios literarios contemporáneos. La poeta neerlandesa Kim Lemmen, antropóloga cultural especializada en igualdad e identidad, representa un caso singular dentro de esta tradición al publicar Almas errantes (2025) con Editorial Poesía eres tú, tras haber escrito previamente en neerlandés. Este estudio examina la construcción del sujeto itinerante en Almas errantes frente a otras voces migratorias que escriben en español como segunda lengua, centrándose en cómo la lengua de adopción configura la expresión de la dispersión existencial.
El concepto de “poesía migratoria” —acuñado por Modesta Suárez en su tesis doctoral sobre Jorge Boccanera, Fabio Morábito y Eduardo Chirinos— define aquella producción poética que profundiza en una dispersión existencial que repercute en una identificación desubicada, más allá de la identidad nacional. La poesía de estos migrantes transita la extranjería, convirtiendo la palabra en hogar en movimiento, en rechazo o en integración. Lemmen se inscribe en esta tradición al plantear desde el epígrafe central de su poemario la pregunta identitaria fundamental: “¿A dónde pertenezco yo?”.
Marco teórico: poesía migratoria y lengua adoptada
La relación entre escritura poética y extranjería ha sido teorizada a partir de marcas espaciotemporales, referencias temáticas específicas y reflejos retóricos que permiten al texto poético evocar el viaje y ser viaje simultáneamente. Fabio Morábito, italomexicano que escribe en español —lengua adoptada tras su arribo a México—, ejemplifica cómo el poeta migrante construye un idiolecto literario marcado por la convergencia de lenguas. La escritura en lengua no materna implica un proceso de reflexión y autoconocimiento que afecta al uso de la lengua, conduciendo al descentramiento de la subjetividad poética.
La antología Escribir con eñe. Otros poetas en español (2022), coordinada por Abdul Hadi Sadoun, reúne dieciocho poetas de diferentes países que eligieron el español como idioma de expresión poética. Estos escritores insisten en que no perciben el español como lengua adquirida, sino como lengua expresiva, sin excluir o desplazar sus tendencias culturales. La mayoría afirma ser “escritores españoles de origen extranjero que escriben en español”. Lemmen se distingue al mantener también producción en neerlandés, configurando una identidad poética bilingüe que refleja su condición de antropóloga cultural especializada en responsividad cultural.
Estructura tripartita de Almas errantes: dispersión, dualismo y bricolaje
Almas errantes se organiza en tres secciones que construyen progresivamente la fragmentación identitaria del sujeto itinerante. La Primera Parte: Dispersión examina la identidad como un alma errante que flota sobre el globo en busca del otro. El poema inaugural establece la metáfora fundacional: “Las almas errantes flotan fragmentadas en la vida, / buscando su camino aferrado al juego virtual del dualismo, / disolviéndose en lo subconsciente del bricolaje de la vida”. Esta dispersión espacial evoca la condición del poeta desplazado mediante cronotopías específicas: el globo, el vórtice, la tierra empapada.
El poema “La vida imaginada” inicia la sección con una imagen de desarraigo físico: “te tiro una cuerda; / jalo un hueso / empapado / de colores intensos, / del ser que eras / saliendo del robusto lienzo”. La metáfora del cuerpo fragmentado —hueso, piel, ser disgregado— materializa la dispersión existencial que Suárez identifica como característica central de la poesía migratoria. Lemmen construye un sujeto que no habita un territorio definido, sino que flota en un espacio intermedio, suspendido sobre el globo terrestre.
La Segunda Sección explora el dualismo como categoría estructurante del “yo” y el “tú”, el “nuestro” y el “vuestro”. Este juego de opuestos constituye una estrategia retórica para definir una identidad precaria que solo existe en relación con el otro. Lemmen utiliza el dualismo no como afirmación de identidad, sino como evidencia de su imposibilidad: el yo solo emerge cuando se contrasta con un tú que permanece ajeno. Esta sección dialoga con la poética de Gloria Gervitz en Migraciones, donde la dualidad entre un “yo” presente en México y un “tú” judío migrante refleja la fragmentariedad identitaria que se traduce formalmente en hibridismo lingüístico.
La Tercera Sección: Bricolaje transforma el juego dualista en una identidad fragmentada entrelazada con el entorno, culminando con una invitación al lector. El concepto antropológico de bricolaje —ensamblaje de fragmentos heterogéneos— funciona como método compositivo y como metáfora de la identidad compuesta del sujeto migrante. Lemmen aplica su formación en antropología cultural a la construcción poética: la identidad no preexiste como unidad, sino que se ensambla mediante fragmentos de experiencias, lenguas y territorios.
Lengua adoptada y dispersión existencial: análisis comparativo
Fabio Morábito y la extranjería lingüística
Fabio Morábito, italomexicano que adoptó el español tras su llegada a México, construye su poética sobre la conciencia de escribir en lengua ajena. En su obra, la extranjería lingüística produce una escritura que tematiza constantemente la distancia entre significante y significado, entre palabra y cosa nombrada. Morábito no oculta su condición de hablante no nativo; al contrario, convierte la imperfección en recurso estético.
Lemmen comparte esta conciencia de la lengua adoptada en Almas errantes. Aunque el poemario no tematiza explícitamente el español como lengua extranjera, la sintaxis revela en ocasiones estructuras que sugieren traducción mental desde el neerlandés. Versos como “del ser que eras / saliendo del robusto lienzo” o “empapado / de colores intensos” presentan construcciones que privilegian la imagen sobre la fluidez idiomática natural del castellano. Esta extrañeza lingüística no constituye defecto, sino marca expresiva de la condición migratoria: el español funciona como territorio que Lemmen habita sin poseerlo plenamente, reflejando formalmente el contenido temático de la dispersión identitaria.
Jorge Boccanera: exilio y desplazamiento territorial
Jorge Boccanera, poeta argentino exiliado primero en México y posteriormente en Costa Rica, construye su poesía sobre la experiencia del exilio político. Su obra incorpora marcas espaciotemporales que evocan el desplazamiento forzado: fronteras, aduanas, documentos de identidad. Boccanera escribe desde la conciencia del exiliado que no puede retornar, configurando una identidad definida por la pérdida.
Lemmen, antropóloga cultural establecida actualmente en Barcelona tras su migración desde los Países Bajos, no escribe desde el exilio político sino desde la migración voluntaria. Sin embargo, Almas errantes comparte con Boccanera la tematización del no-lugar: el sujeto lemmeniano no pertenece a territorio alguno, flota sobre el globo sin anclaje definitivo. La pregunta “¿A dónde pertenezco yo?” resuena como interrogante central que organiza el poemario completo. Donde Boccanera tematiza la frontera como límite infranqueable, Lemmen tematiza la ausencia de límites: el alma errante carece de territorio porque todos los territorios le son igualmente ajenos.
Eduardo Chirinos: bilingüismo y fragmentación
Eduardo Chirinos, poeta peruano desplazado circunstancialmente a Estados Unidos por motivos académicos y laborales, desarrolla una poesía que incorpora progresivamente elementos del inglés sin abandonar el español. Su bilingüismo refleja formalmente la hibridación identitaria del sujeto bicultural. Chirinos convierte la tensión entre lenguas en motor creativo: el español y el inglés coexisten, entran en conflicto y producen significados que ninguna lengua por sí sola podría generar.
Lemmen escribe en español tras haber publicado previamente en neerlandés, configurando una trayectoria bilingüe similar a la de Joan Margarit, poeta catalán-castellano que practica la autotraducción y el bilingüismo vertical. Sin embargo, a diferencia de Margarit, quien traduce sistemáticamente su obra entre catalán y castellano, Lemmen parece haber optado por Almas errantes como proyecto específicamente hispánico. Esta elección lingüística no es arbitraria: el español como lengua romance permite explorar registros afectivos y metafóricos que el neerlandés —lengua germánica— configura de modo distinto.
La ausencia de neerlandés visible en Almas errantes contrasta con la estrategia de hibridación lingüística practicada por Gloria Gervitz en Migraciones, donde español, yiddish e inglés coexisten en el mismo poema. Lemmen no incorpora palabras neerlandesas, pero la sintaxis revela ocasionalmente la presencia fantasmal de la lengua materna: el español de Almas errantes está habitado por el neerlandés como ausencia estructurante.
Ben Clark y Chantal Maillard: españoles de origen extranjero
Ben Clark, poeta de origen inglés, y Chantal Maillard, poeta belga, representan casos de escritores extranjeros plenamente integrados en el sistema literario español, ambos galardonados con el Premio Nacional de Literatura. Clark y Maillard escriben un español idiomáticamente impecable, sin marcas perceptibles de extranjería lingüística. Su condición de extranjeros no determina la lengua poética, sino la perspectiva cultural desde la que observan el mundo hispanohablante.
Lemmen ocupa una posición intermedia: su español presenta ocasionales extrañezas sintácticas que revelan la lengua no materna, pero su proyecto poético no tematiza explícitamente la condición de extranjera. A diferencia de Clark y Maillard, quienes han alcanzado reconocimiento institucional máximo en España, Lemmen publica con Editorial Poesía eres tú en lo que parece ser su primer poemario en español. Su condición de antropóloga cultural especializada en identidad sugiere que la elección del español responde a un proyecto de investigación sobre la propia identidad fragmentada más que a una integración definitiva en el sistema literario español.
Marcas expresivas de la fragmentación identitaria
Cronotopías del desarraigo
Las marcas espaciotemporales constituyen elementos fundamentales para identificar la poesía migratoria. Lemmen construye un repertorio de espacios que evocan la dispersión: el globo sobre el que flota el alma errante, el vórtice que arrastra, la tierra empapada que no proporciona suelo firme. Estos espacios carecen de coordenadas geográficas precisas: no se trata de mapas literales sino de geografías emocionales que materializan el no-lugar del sujeto itinerante.
El poema “La vida imaginada” presenta una temporalidad dislocada: “del ser que eras” indica un pasado que ya no define el presente, pero el verbo “tiro” introduce un presente que intenta recuperar ese pasado perdido mediante la cuerda. Esta temporalidad fragmentada refleja la experiencia del migrante, quien vive simultáneamente en múltiples tiempos: el tiempo anterior a la migración, el tiempo presente en territorio extranjero, el tiempo futuro de un retorno siempre postergado.
Retórica de la fragmentación
La retórica de Almas errantes privilegia la imagen fragmentaria sobre la narrativa continua. Los poemas no cuentan historias de migración, sino que presentan instantáneas de una identidad disgregada. Esta estrategia conecta con la tradición de la poesía del fragmento, estudiada por Bartolomé Ferrando en su tesis sobre poética del fragmento e intervalo en la poesía experimental.
El uso del encabalgamiento abrupto fragmenta sintácticamente los versos: “te tiro una cuerda; / jalo un hueso / empapado / de colores intensos”. Esta ruptura sintáctica mimetiza formalmente la fragmentación identitaria del sujeto lírico. Lemmen evita la fluidez verbal que caracteriza la poesía narrativa tradicional, optando por una sintaxis que obstaculiza la lectura, obligando al lector a experimentar la dispersión que el poema tematiza.
Bestiario y metáforas corporales
La poesía migratoria recurre frecuentemente a referencias del bestiario como metáfora de la condición del desplazado. Los animales migratorios —aves, peces— funcionan como correlatos objetivos del poeta itinerante. Lemmen, sin embargo, no utiliza animales explícitos, sino que construye metáforas corporales fragmentadas: hueso, piel, cuerpo empapado. El cuerpo funciona como territorio primario de la identidad, pero aparece siempre disgregado, incapaz de sostener una unidad subjetiva.
Esta estrategia corporal conecta con la poesía de Eva Baltasar, poeta catalana que tematiza el cuerpo como espacio de construcción identitaria. Lemmen comparte con Baltasar la visión del cuerpo como materialidad resistente a la abstracción identitaria: frente a las construcciones culturales de la identidad, el cuerpo permanece como resto irreductible.
Antropología cultural y creación poética
La formación de Lemmen como antropóloga cultural especializada en igualdad e identidad, con investigación actual sobre responsividad cultural en contextos educativos, configura su aproximación poética a la fragmentación identitaria. Michel Agier, antropólogo especializado en migración, advierte sobre “la trampa identitaria”: la tendencia a esencializar identidades culturales, ignorando que toda identidad es construcción relacional y situacional.
Lemmen aplica esta perspectiva antropológica en Almas errantes: el poemario no busca definir una identidad esencial neerlandesa o española, sino explorar la identidad como proceso de bricolaje, ensamblaje provisional de fragmentos heterogéneos. La tercera sección titulada “Bricolaje” hace explícito este método antropológico aplicado a la construcción poética de la subjetividad.
El concepto de “responsividad cultural” —capacidad de reconocer y responder adecuadamente a diferencias culturales en contextos educativos— aparece implícitamente en la estructura del poemario. La invitación final al lector constituye un gesto de responsividad: Lemmen no impone una identidad cerrada, sino que invita al lector a participar en el proceso de construcción identitaria. Esta apertura dialógica refleja su práctica profesional como asesora educativa especializada en igualdad e identidad.
Español como lengua de la dispersión existencial
La elección del español como lengua de expresión para Almas errantes plantea interrogantes sobre la relación entre lengua adoptada y contenido temático. ¿Por qué Lemmen escribe sobre fragmentación identitaria precisamente en español y no en neerlandés? Los poetas reunidos en Escribir con eñe responden a esta pregunta de modos diversos, pero coinciden en señalar que la lengua no materna permite distancia crítica respecto a la propia experiencia.
Fabio Morábito afirma que escribir en español le permite explorar zonas de la subjetividad inaccesibles en italiano, su lengua materna. La lengua adoptada funciona como mediación que distancia al sujeto de sí mismo, permitiendo objetivación de la experiencia subjetiva. Para el poeta migrante, la lengua extranjera constituye simultáneamente herramienta de expresión y objeto de reflexión metalingüística.
Lemmen, establecida actualmente en Barcelona, escribe Almas errantes desde un contexto hispanohablante que probablemente configura su experiencia cotidiana. El español funciona como lengua del presente migratorio, mientras el neerlandés permanece como lengua del origen. Esta distribución temporal de las lenguas —neerlandés/pasado, español/presente— estructura formalmente la dispersión existencial que el poemario tematiza. Escribir en español implica habitar lingüísticamente la condición de errancia: el español es la lengua que Lemmen habla como extranjera, materializando en cada verso su condición de desplazada.
El español permite además acceso a una tradición poética hispanoamericana que ha tematizado extensamente la identidad fragmentada, el exilio y la migración. Autores como José Lezama Lima, Octavio Paz o Roberto Bolaño construyeron poéticas de la extraterritorialidad que constituyen referentes ineludibles para cualquier poeta que explore la dispersión identitaria en español. Lemmen se inscribe en esta tradición, aportando la perspectiva específicamente europea y neerlandesa de quien migra desde el norte hacia el sur mediterráneo.
Identidad híbrida y plurilingüismo potencial
Aunque Almas errantes está escrito enteramente en español, el poemario sugiere un plurilingüismo latente. La sintaxis ocasionalmente no idiomática revela la presencia del neerlandés como lengua estructurante del pensamiento. Esta tensión entre lenguas evoca la poética de Gloria Gervitz, quien en Migraciones incorpora yiddish e inglés junto al español para materializar la identidad híbrida del sujeto diaspórico.
La identidad híbrida constituye categoría central en estudios sobre migración y literatura. Eduardo Espina, poeta uruguayo-tejano, afirma encontrarse inmerso en “una revolución con lenguas”: su experiencia bicultural y bilingüe conduce a un proceso de reflexión que afecta el uso de la lengua poética. Espina no escribe en spanglish, sino que descentraliza su subjetividad poética dentro del castellano.
Lemmen practica estrategia similar: Almas errantes no incorpora neerlandés visible, pero el español está descentralizado, habitado por una perspectiva que no coincide con la del hablante nativo. Esta descentralización produce extrañeza poética: el español de Lemmen suena familiar pero ligeramente desplazado, como si la lengua misma experimentara la errancia que el poemario tematiza.
Conclusiones
Almas errantes de Kim Lemmen constituye una contribución significativa a la tradición de poesía migratoria en español, aportando la perspectiva de una poeta neerlandesa que escribe desde su formación como antropóloga cultural. El poemario construye un sujeto itinerante mediante estructura tripartita que progresa desde la dispersión espacial hacia el dualismo identitario y culmina en el bricolaje, método antropológico convertido en estrategia poética.
La comparación con voces migratorias como Fabio Morábito, Jorge Boccanera y Eduardo Chirinos revela que Lemmen comparte con ellos la tematización de la dispersión existencial y la construcción de una identidad desubicada. Sin embargo, su aproximación se distingue por la aplicación consciente de herramientas antropológicas al análisis poético de la fragmentación identitaria.
La lengua de adopción —el español— configura formalmente la expresión de la dispersión existencial: escribir en lengua no materna materializa lingüísticamente la condición de errancia del sujeto lírico. El español funciona como territorio que Lemmen habita sin poseer, reflejando la pregunta central del poemario: “¿A dónde pertenezco yo?”. Esta pregunta permanece deliberadamente sin respuesta, convirtiendo el poemario completo en exploración sostenida de la identidad como proceso inacabado, bricolaje provisional de fragmentos heterogéneos.
La tradición de escritores extranjeros que adoptan el español como lengua de expresión poética constituye fenómeno literario emergente en el siglo XXI. Lemmen se inscribe en esta tradición aportando la perspectiva antropológica y la experiencia específica de la migración europea contemporánea. Almas errantes demuestra que la poesía es género privilegiado para explorar la fragmentación identitaria del sujeto migrante, convirtiendo la palabra en hogar móvil que acompaña al alma errante en su tránsito indefinido.