1

Hoy me siento feliz. Miro por la ventana y juego a ver qué forma tienen las nubes mientras espero que regreses a mí, a casa. Cuando llegas el sol se hace todavía más brillante, irradia una energía maravillosa y calienta mi cuerpo desnudo, mi larga melena. El día es nuestro. Haremos siluetas en nuestras espaldas desnudas, rozándonos, poco a poco. Haremos el amor en cualquier lugar de la casa, así piel contra piel hasta el atardecer. Cuando caiga la noche contaremos estrellas fugaces y pediremos el deseo más bello, ser libres para siempre, juntos claro. Hoy es un día especial, es nuestro día, de besarnos lento, de agarrarnos fuerte, de no soltarnos, de quedarnos dormidos abrazados. No te muevas, en tu pecho está la magia.

5

Cuando estamos juntos me elevas al cielo con tus manos, con tus caricias, con el roce de piel contra piel. Tú y yo somos magia, un amor imparable. Tu sonrisa me transporta al más bonito jardín, lleno de flores claro. Haz de mí una obra de arte, dibuja mi silueta desnuda en un papel para nunca olvidarte de ella, yo recorreré la tuya con mis dedos para conservarla en la memoria. Quedémonos juntos para siempre, hagamos de esto una obra de amor, una canción que siempre acaba bien.

14

Eres mi hogar, mi casa, mi rincón favorito del mundo. Con tu voz me das calma, paz, como oír la lluvia caer por los cristales de nuestra habitación y nosotros desnudos en la cama, jugando a cualquier juego tonto. Déjame que te diga con sinceridad que me encantas tú y tus tormentos, esos que a veces no te dejan dormir, pero yo te acariciaré el pelo para que se te pase la angustia, el malestar. Hazme tuya en cualquier rincón, bésame lento el cuello para luego decirme que te quedas a vivir en mí, siempre en mí. Hagamos poesía de lo nuestro, unos versos sin sentido pero con amor, con pasión. Dime que los días fríos de invierno me buscarás en un abrazo, para ser yo tu abrigo, tu calidez, para hacer del invierno una primavera llena de flores.

23

Te veo al despertar y es como ver la puesta de sol más bonita del mundo en verano, en el mar. Un café y tu sonrisa, esa que hace que me vuelva loca, que quiera perderme en ti, en tu cuello a cada rato. Quédate aquí, en mí, no te muevas. Quiero tu compañía, tus deseos más locos, los haremos en cada rincón de la casa. El día es nuestro. Cuéntame tus sueños, los cumpliremos todos, uno a uno sin excepción. No te gires amor, bésame lento el cuello, dibuja mi silueta con tus dedos y luego llámame arte.

30

Ahora que ya no estás mi amor te echo de menos. Echo de menos las noches en las que dibujabas constelaciones con mis lunares para decirme luego que te quedabas a vivir en mi espalda. Echo de menos los juegos tontos entre las sábanas revueltas cualquier día a cualquier hora. O esas canciones que ponías a todo volumen para bailar por la casa sin parar, juntos claro. Ahora que ya no estás tengo en el pecho una canción inacabada de amor, una triste historia que siempre acaba mal. Vuelve a por mí, te estoy esperando, trae una copa lo celebraremos juntos. Sabes dónde estoy, no tardes, la primavera te espera.

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